¿Qué es la permacultura?

Según sus creadores, los australianos Bill Mollison y David Holmgren, la permacultura es la filosofía de trabajar con, y no en contra de la naturaleza; de observación prolongada y reflexiva, en lugar de labores prolongadas e inconscientes; de entender a las plantas y los animales en todas sus funciones, en lugar de tratar a la áreas como sistemas mono-productivos. O dicho de otro modo: la integración sostenible del urbanismo en la naturaleza.

La permacultura se sustenta sobre tres principios fundamentales:

1. Cuidar de la tierra, haciendo un uso responsable de ella. No arar la tierra, ya que al removerla y exponerla a la acción de sol perdemos humedad y microorganismos constantemente, y propiciar las condiciones para que las plantas puedan desarrollarse con la mínima intervención. Los expertos en este área recomiendan crear un acolchado sobre la tierra recién cultivada a base de paja, que permite mantener insectos y otros organismos además de evitar la erosión de la tierra y mantener la humedad.

El libro guía que explica este procedimiento es "La revolución de una brizna de paja", de Masanobu Fukuoka.

2. Cuidar de las personas, todo el mundo debe tener el mismo derecho y acceso a los recursos y conocimientos, y ser capaces de decidir libremente respetando a otras personas, pueblos y comunidades.

3. Poner límites a la población y el consumo, redistribuyendo los excedentes de manera equitativa y justa.

La flor de la permacultura:

Cada uno de sus pétalos contiene un aspecto de nuestra sociedad que es necesario revisar y rediseñar para conseguir una sociedad más eficiente.

Por todo esto, desde que se creó esta filosofía en 1979, muchos son los pueblos o aldeas que han adoptado esta forma de vida. En España, una de las escuelas más famosas es Caña Dulce, en Coín, Málaga, donde hacen cursos en verano para todo el que quiera aprender a convivir con estos principios.

Gracias, JJ, por sugerirme el tema para el blog.

Una casa capaz de generar más energía de la que consume

El proyecto The Solcer House se ha hecho posible en la Universidad de Cardiff, Gales, donde se ha utilizado el prototipo de la española Ester Coma Bassas para hacer realidad algo que muchos creían imposible o muy caro: un urbanismo sostenible.

Esta vivienda consta de unos 125 metros cuadrados y tres plantas, aisladas térmicamente para que las pérdidas sean mínimas y así ahorrar energía. Se ha construido en 16 semanas y el coste por metro cuadrado es de unas 1.000 libras, cantidad que podría disminuir si se construyeran más viviendas de este tipo al mismo tiempo.

Esta casa tiene integrados varios paneles fotovoltaicos en la cara sur de la fachada y en el tejado, de manera que se aprovechan más las horas de luz y forman un conjunto armónico y natural .Usa un generador solar y una batería que, en combinación, son capaces de suministrar electricidad, calefacción, ventilación y agua caliente, además de almacenar el exceso de energía y exportarla a la red eléctrica. Por cada 100 libras esterlinas gastadas en electricidad puede generar 175 libras en exportación de la misma.

Con este proyecto se demuestra que la construcción de un hogar eficiente es asequible hoy en día, y que si los gobiernos invirtieran un poco más en este tipo de tecnologías podríamos tener ciudades mucho más limpias en pocos años.

Una alternativa ecológica a las placas solares

Saludos, neourbanitas.

A muchos os habrá extrañado el título, porque ¿puede haber algo más ecológico que la energía solar? La respuesta es no, pero parece que las herramientas que utilizamos para hacer uso de ella, las placas solares que existen hoy en día, no son todo lo ecológicas que deberían. Investigando un poco he llegado fácilmente a la conclusión de que la fabricación de estos paneles genera muchos residuos, y aunque ya hace años que se implantaron normas para deshacerse de estos desechos de manera responsable, la solución está lejos de ser definitiva.

Los expertos se quejan de que se necesitan grandes cantidades de silicio para fabricarlas (la mayoría de las placas solares utilizan este elemento), y que esto conlleva el problema de que los mineros que obtienen este material están expuestos a la fatídica silicosis pulmonar. Además, el proceso de refinamiento para obtener polisilicio produce grandes cantidades de tetracloruro de silicio, un compuesto muy tóxico que causó un desastre ecológico en China hace siete años, dejando campos vecinos inservibles para el cultivo, matando ganado e inflamando los ojos y las gargantas de los habitantes más próximos.

La alternativa que se está investigando hoy en día es el grafeno. Se trata de un material recientemente descubierto, impermeable y flexible, que se puede obtener fácilmente mezclando grafito en polvo, agua y detergente en una batidora. Es cien veces más eficaz que el silicio como conductor eléctrico y más fuerte que el diamante, lo que lo ha convertido a ojos de muchos expertos en el material del futuro. Su reciclaje no supone ningún problema, ya que está compuesto básicamente por carbono.

Chardigarh, primera ciudad del futuro en la India

Saludos, neourbanitas.

Hace poco tiempo me pasaron información sobre varias ciudades que fueron un intento más o menos fallido de crear una ciudad del futuro. El primer ejemplo es Chardigarh, en uno de los países más poblados del mundo.

El proyecto comenzó en 1951. Después de la ocupación británica en el país, el gobierno indio decidió crear una nueva capital para intentar solucionar los problemas de hacinamiento en las principales ciudades ya existentes, y tras algunos problemas iniciales se encargó la construcción de dicha ciudad a Charles-Édouard Jeanneret-Gris, más conocido como Le Corbusier.

Este señor, que ya llevaba años desarrollando lo que él consideraba la optimización del urbanismo, decidió organizar la ciudad en sectores, sesenta nada menos, y cada uno de ellos funcionando de manera independiente con sus propios mercados, escuelas y templos situados a menos de diez minutos desde cualquier extremo del sector. Para unirlos hacían falta grandes avenidas, que serían el lugar perfecto para incluir parques y jardines.

A primera vista parecía un gran plan, entonces ¿cuál fue el problema? Para empezar, se contaba en un principio con que la ciudad albergara a medio millón de personas, pero hoy en día son casi millón y medio los habitantes de esta ciudad. Los edificios de viviendas se diseñaron con pocos pisos, por lo que habría que tirar edificios enteros para construirlos más altos. Tampoco se puede ampliar la ciudad sobrepasando sus límites, ya que la zona geográfica no lo permite. Además, Le Corbusier no tuvo en cuenta ni la cultura ni las tradiciones de este país a la hora de plasmar el proyecto, por lo que algunos edificios destinados a viviendas se usan como zonas comerciales o mercados abiertos. La superpoblación genera también un problema de tráfico, pues aunque la ciudad cuenta con avenidas muy anchas, no son suficientes para contener todo el tráfico que acumula esta disposición.

Aún así, Chardigarh es la mejor ciudad de la India. Prolifera como la ciudad más rica del país, con más coches por número de habitantes, edificios públicos de hermosa arquitectura, avenidas amplias y limpias y un lago artificial para disfrute de sus habitantes.

Vidrio inteligente en Neo París

Saludos, neourbanitas.

En mi última entrada hablé sobre las colonias ecológicas del Mass Effect, y hoy quisiera compartir con vosotros otra experiencia chula en otro videojuego que he terminado hace poquito, el Remember Me. El juego está basado en un futuro un tanto oscuro, donde una megacorporación ha desarrollado una herramienta para guardar tus mejores recuerdos, borrar los dolorosos y poder compartir con otras personas tus experiencias como si ellos también hubieran estado allí. El concepto es chulo aunque asusta un poco, tal y como se ve en el videojuego.

Lo que me llamó la atención, y quiero compartir en este artículo con vosotros, son los escaparates de las tiendas de esta ciudad. Al ver a Nilin pasear por Neo París, es asombroso ver cómo cuando se acerca a una tienda, se despliega inmediatamente un cartel virtual en el escaparate en el que puedes ver la hora, las ofertas de ese día, cuánto vale un café, las noticias de última hora... 

Esta tecnología me recordó a un vídeo que vi hace tiempo en youtube y que me gustaría compartir con vosotros. Parece que este futuro está cada vez más cerca, imaginaos lo que podría hacer un grupo de ingenieros motivados para construir esto en una colonia experimental. Espero que lo disfrutéis tanto como yo.

Mass Effect, inspiración para un nuevo mundo.

Saludos, neourbanitas.

Muchos de vosotros habréis disfrutado de este gran videojuego, uno de mis favoritos. Hace unos años, al ir paseando de la mano de la comandante Shepard por colonias humanas como Eden Prime, Horizonte, etc, me di cuenta de que algo así podría hacerse hoy en día. Ya existen casas prefabricadas, pero la idea sería crear una especie de contenedores ecológicos, con placas solares que pudieran abastecer de energía a toda una colonia, mesas con cargadores inalámbricos dentro de los habitáculos (nada de enchufes), y muebles ligeros y resistentes que pudieran transportarse con facilidad.

Después de convencerme a mí misma de que esto era posible pensé... vale, seguro que puede hacerse, pero ¿dónde?. La respuesta me vino a la cabeza sin buscar demasiado: ¡anda que no hay pueblos fantasma en España que podrían repoblarse y adaptarse a una mini colonia del futuro! Yo me apuntaría sin pensarlo a un proyecto así, la construcción con ladrillos no es eficiente, creo que los paneles son mucho más manejables y adaptables a futuras ampliaciones o reformas de la vivienda. Claro, que habría que aislarlos de la temperatura exterior y del ruido, pero eso son menudencias que se podrán resolver sin mucha complicación. ¡Se aceptan sugerencias al respecto!

Os dejo unas fotos de este tipo de colonias en el videojuego, no me digáis que no molaría vivir en un sitio así.